TRAIGO ALGUNAS COSITAS NUEVAS, ESTUVE VIAJANDO POR muchos lugares.
cONOCi a artistas maravillosos que no sabia que existían como por example a esta que hoy también ustedes van a conocer.
Vali Myers (2 agosto 1930 hasta 12 febrero 2003) fue una australiana, artista visionaria, bailarína, bohemia y musa cuya cobertura por los medios de comunicación era en su mayoría en las décadas de los años 1950 y 1960 en Europa y Estados Unidos.
Myers nació en Canterbury , Sydney el 2 de agosto de 1930, de una madre, violinista y el padre operador inalámbrico marino. Ella muestra un talento para el arte a una edad temprana. La familia se trasladó a Box Hill , Melbourne en 1941 y Vali fue de casa a los 14. Después de trabajar en las fábricas para apoyar sus clases de baile, ella se sumergió en la danza y más tarde se convirtió en el primer bailarín de la Compañía de Ballet Moderno Melbourne. [1] En 1949 a los 19 años Myers viajó a empobrecida posguerra Paris para seguir una carrera de baile, pero encontró viviendo en las calles de la Saint-Germain-des-Prés barrio en la orilla izquierda. [1] el amor en la orilla izquierda es un libro 1954 de fotografías de fotógrafo holandés Ed van der Elsken (1925-1990), que documenta la vida bohemia de la Rive Gauche de París; Vali Myers es la heroína de esta semi-biográfica novela en clave , y también se fotografió junto con algunos de sus primeros dibujos.
Myers fue un artista de la fantasía extravagante que trabajaba en pluma y tinta y acuarela, además de ser una bailarina de club nocturno. Dividió su vida entre su hogar adoptivo de Melbourne, el Hotel Chelsea en Nueva York , París, y una casa de campo del siglo 14 en un valle cerca de Il Porto ( Positano ), Italia .
Sus obras de arte imaginativo desarrollados a partir de los primeros monocromos detalladas a una amplia gama de colores vibrantes y tonos [2] que se extienden a la acuarela y pan de oro, mostrando una "representación meticulosamente prestados de un mundo espiritual personal". [3] Ella estaba familiarizado con muchas celebridades y creativos incluyendo Tennessee Williams , Salvador Dalí , Django Reinhardt , Jean Cocteau , Patti Smith , Jean Genet , Sam Shepard y muchos otros.
Pinturas de Myers han vendido hasta por $ US40,000 ($ A68,000) en Nueva York. Su trabajo se realizó en la colección Stuyvesant en el Países Bajos , Hurryman Colección de Nueva York, y es propiedad de coleccionistas privados como George Plimpton y Mick Jagger
La chica en la fotografía de enfrente y cuyos dibujos siguen es Vali Myers. En París, donde ella vive, ella va bajo otros nombres: los camareros en los pequeños boites donde ella baila la llaman ella charla;Los conserjes la llaman la bete; También se le llama varias veces l'enfant da feu por sus llamativos cabellos de color rojo cobre casi naranja y la mote vive por su rostro de cadáver y pesada sombra de ojos, una rareza cosmética que inició una moda existencialista que gozaba de una moda menor hace pocos años. Ella es australiana por nacimiento. Su padre es marinero y su madre violinista en la Orquesta Sinfónica de Sydney. Vali llegó a Francia justo después de la guerra. Aún con menos de veinte años, se convirtió en el símbolo y el juguete del inquieto, confuso, vicioso, demi-monde que poblaba algunos de los cafés y boites de la Margen Izquierda -La Petite Source, Le Mabillon, Le Café; Metro, La Chope Gauloise, Le Mónaco.
Ella es el tema de un libro titulado Love on the Left Bank (publicado por Andre Deutsch), que describe el grupo "hipster" que frecuentaba estos cafés. El libro incluye un texto desagradable y desafortunado, pero sorprendentes fotografías-estudios gráficos de Vali y sus amigos, caras jóvenes, siempre triste, droga-frecuentado, y cubierto con feroz cultivos de cabello. La mayoría de las fotografías son retratos de grupo llenos de rostros, pero rara vez caras de animación, cada tema aparte del otro para que a menudo la colección parece un estudio de los reclusos de asilo.
Destacan en todo el libro las fotografías de Vali, primer plano de su rostro extraordinario, un rostro fantasma que conviene a los escenarios parisinos de la calle vacía de la noche, de los edificios desmoronados y inclinados del barrio latino y de la oscuridad y el humo Botes -Laden donde Vali baila en un estrecho anillo de espectadores al ritmo de arbusto de África songs.Her baile es notable: una sinuosa arrastrando los pies, las rodillas dobladas, los hombros y las manos se mueven a la velocidad a la temblorosa drumbeats.
Ella lleva los pantalones vaqueros azules, Una camisa de hombre tirada en la cintura por un ancho cinturón negro y zapatillas rojas de ballet que ella a menudo se pone en marcha para bailar con los pies desnudos planos. Su audiencia, casi siempre hombres, la miraba en lugar de mirar, y es curioso que sus pies nunca toquen el derroche de la música africana, ni las manos ni los dedos aprovechan el tiempo -una absorción por parte de sus espectadores que es Exclusivamente visual. Una amiga lo explica así: "La vi bailar y nunca oí la música, le dije: 'Hombre, ¿cómo puedes bailar así? Tienes que ser un eslabón perdido'. Como supongo que Kiki de Montparnasse era para aquellas personas de los años veinte, Vali era lo mismo para nosotros, y tú viste en ella la personalización de algo rasgado y profundo y primitivo en todos nosotros ... y, Hombre , Se podía ver moviéndose justo enfrente de usted en zapatillas de ballet y la camisa de un hombre ".
Vali nunca bailó en un escenario profesional. Prefirió la pequeña cantidad de cuadros cuadrados que había limpiado para ella en pequeños clubes como L'Escale en la Rue Monsieur-le-Prince o el Rose Rouge; El sábado invariablemente se presentaba en el vasto salón de baile del Bal Nègre, en la calle Blomet, allí para bailar hora tras hora con los senegaleses, los bailarines de Camerún, de Martinica, tomándolos uno tras otro y dejándolos escalonados agotamiento.
De vez en cuando, alguien impresionable y bastante rico le deslizaría unos cientos de francos. Pero Vali, en sus primeros días en París, no vivía prácticamente de nada. Sus escasas pertenencias estaban esparcidas por todo el barrio en cafés, casas de buenas, en estudios donde a veces se sentaba como artista. Llevaba sus posesiones premiadas con ella en una maleta de alambre en forma de jaula de pájaro. En ella, un pañuelo, un maquillaje para los ojos y un polvo para el rostro, un volumen de poesía de Thomas Chatterton, sus materiales de arte y un curioso trozo de piel en forma de zorro en miniatura con dos ojos incrustados en un extremo: un recuerdo A la que se refiere como "el feeley y con el que habla de vez en cuando, ya menudo emite polvos, fuertemente, con polvo facial.
Los cosméticos constituyen una parte importante de la vida de Vali.Tarda más de una hora en levantarse por la mañana. Primero le da una palmada en la cara, con los labios incluidos, blanco puro con polvo de cara; Entonces, con infinito cuidado, pinta un círculo de una sombra de ojos negros alrededor de sus ojos. La preparación que utiliza se llama kohl-una combinación de aceite y un polvo negro de la India. El resultado no es sólo para mostrar; A Vali le gusta señalar el valor utilitario de su maquillaje. "En Oriente, sabes", dice, "usan este material ocular para evitar el mal, las moscas no cruzan el negro, puede parecer extraño a la gente, pero los dioses en el Tíbet son feos también y se mantienen Lejos las cosas malas ".
Después de que Vali se haya puesto el rostro, pasa las manos a través de un torcido y desordenado crecimiento de pelo naranja que llega a su cintura y ella está lista para el día.
El aspecto que ella presenta al mundo exterior es naturalmente el más llamativo; Vali puede recordar una serie de casos cuando la gente de repente se acercó a ella en una esquina y han gritado. La mayoría de las mujeres están consternadas por ella. El escritor Gabriel Pommerand señala en un ensayo sobre Vali que "las mujeres sólo pueden considerar su aspecto con desprecio, ya que ella desobedece todas las últimas leyes de la belleza convencional". Algunas mujeres, sin embargo, particularmente del mundo de la moda, están encantadas por su manera y personalidad. Le dan a ella los pernos de material de los cuales ella hace las camisas de piso-longitud de la casa. La reacción de los hombres es completamente humana. Les gusta verla bailar; Muchos se han enamorado de ella; Muchos se divierten con su compañía en el sentido de que uno podría disfrutar de estar acompañado, como escribe Pommerand, por "un guepardo con una correa".
Comunicarse con Vali no es fácil.
Vali casi no tiene conocimientos generales. Sus intereses son particulares y esotéricos. Ella sabe que las obras de Edward Eitzgerald, Edith Sitwell, lee a Emily Bronte todos los días, y está copiando las obras de los años y un día tendrá sus obras recogidas en su mano infantil. Está dedicada a los poetas irlandeses, impresionada por ellos, entre otras razones, porque cree erróneamente que todos han muerto a una edad muy temprana. Casi cualquier artista que ha muerto jóvenes intereses Vali. La gran figura literaria en su vida, por ejemplo, es el poeta inglés del siglo XVIII Thomas Chatterton. En su mesita de noche guarda una reproducción de la postal de la muerte del poeta pintada por Henry Wall es-el original cuelga en la sección PreRaphaelite de la Tate Gallery de Londres- mostrando al poeta, su pelo tan rojo como el de Vali y casi tan abundante, se derrumbó sobre una cama De una dosis fatal de arsénico tomada justo antes de su decimoctavo cumpleaños.
Chatterton no es un poeta bien conocido; Pero su fracaso, su precocidad, su miseria, la vuelta romántica a sus versos, su suicidio, todo ha tenido un efecto de combustión en Vali. Ella misma tenía planes de acabar con ella en su veintitrés cumpleaños. Sus amigos más íntimos fueron invitados a mirar, a sentarse al pie de su cama mientras ella yacía en ella con su "feeley" escondido a su lado, y, inconsciente de las consecuencias legales que llegarían a su audiencia como accesorios antes y al hecho , Ella debía tragar arsénico mientras los miraba.
Hace dos años Vali renunció a algunos de sus extraños deseos, se casó con un joven arquitecto austríaco y abandonó sus cafeterías por una pequeña habitación de un hotel de la rue des Canettes, cerca de St. Germain des Prés, un hotel dirigido por una mujer Llamada Celeste, que se dice que fue la ama de llaves de Proust. Celeste, bastante extraña, es una de las pocas mujeres que aprecian a Vali. -¡Ah! -dice ella-. Vas a ver al extraño, mi joya favorita.
Con el matrimonio la vida de Vali ha cambiado. A pesar de que sigue pintando su rostro y sigue bailando -para la música de un solo disco agrietado jugado en una antigua victrola-, rara vez deja su habitación para sus viejos lugares. Ella se refiere a su pasado como "ese viejo tiempo de los cafés", "ese tiempo extraño", y habla de haber escapado de lo que era un "poco como un campo de batalla". Ella es feliz en el matrimonio y con la caja de seguridad de un pequeño cuarto que está iluminado por la electricidad y huele fuertemente de incienso egipcio. Se ha cortado del mundo exterior. La única ventana que da a la calle está protegida por cortinas pesadas que apenas se han abierto desde que Vali y su esposo se mudaron. Vali ha visto poca luz solar en dos años. Odia la luz del sol y en sus primeros días en París, cuando las circunstancias la llevaban de vez en cuando a las calles diurnas, abrazaba los edificios, manteniéndose en las sombras ya través de las calles abiertas que corría -su brazo lanzado para proteger su rostro del sol . La noche, y la luna, le encanta, y nunca sale del hotel hasta mucho tiempo después del anochecer, por lo general a medianoche, para forrajear con su marido en las calles y canalones para el papel de oropel en bon-bon y paquetes de cigarrillos. Los dos usan el papel de oropel para hacer móviles diminutos y finos que son tan delicados que suspendidos del techo en esa habitación sin aire pueden temblar y girar en la fuerza de una risa.
Tinsel papel también se ha utilizado en la cuidadosa construcción de réplicas minúsculas de figuras humanas que se encuentran en la mesilla de noche. Son de Vali, su marido, el feeley y algunas de sus pertenencias, una cama, los zapatos de ballet rojo de Vali. Cuando los dos van en un viaje, esta familia se embala cuidadosamente en una pequeña caja y va junto con ellos. A la manera de los adoradores paganos de la imagen, Vali toma casi un cuidado maníaco de estas minúsculas figuras, su bienestar íntimamente y místicamente identificado con el suyo propio.
Casi todos los artefactos de la habitación tienen una identificación mística equivalente. Y lo mismo puede decirse de los dibujos de Vali.Shespeiks de ellos como manifestaciones de un impulso para la paz y la seguridad. Ella dibuja principalmente autorretratos-Beardsley-como reflexiones de sí misma, por lo general en una actitud de muerte en una cama; Ella está dormida (o muerta), compuesta, custodiada por los búhos y las flores de cinco pétalos que están entre los dispositivos que ella considera buena suerte. Cinco es su "número protector"; Ella insistió en la habitación 15 en el hotel (la habitación 5 estaba permanentemente ocupada por otro residente), y ha tatuado en su pie una flor con cinco pétalos que ella hizo ella misma con una aguja y tintas de color. "Necesito mis lechuzas y mis flores", dice ella, "para evitar las cosas malas, soy muy traviesa".
Los dibujos a veces llevan a Vali hasta dos años. En sus primeros días trabajó en ellos en el café; Las mesas, los ojos en el humo de los cigarrillos, mientras tocaba un bolígrafo finlandés hecho en inglés sobre el papel "como una mosca", cada toque hecho con el cuidado de un pintor persa en miniatura con su cepillo de pelo de cola de gato.
Una vez completada, Vali se niega a vender sus dibujos. No es una cuestión del tiempo que ha gastado en ellos, sino simplemente que su identificación con cada uno es tal que una venta destruiría un apoyo que necesita para apoyar su existencia extraña. Los dibujos son, de hecho, conservadores de la vida según el extraordinario y solitario canon que ella misma ha creado.
--BRECHA
Vali no tardó toda una vida en saber quien era. A los 19 años partió desde Australia a Francia a estudiar danza y poco tiempo después comenzó a dedicarse exclusivamente a la ilustración y pintura. Al pasar por una etapa de exaltación creativa, Vali regresa a vivir a su país el año 1952, y se asienta en el valle de Positano. Escogió como hogar una antigua casa de madera y comenzó un radical estilo de vida ecológico, absteniéndose de comer carne, rodeándose de perros, gatos, gallinas, burros, ovejas, una cerda llamada Ramona y su amado zorro, Foxy.
Fue una artista capaz de traducir las visiones en colores que tenía en sus trances místicos. Sus dibujos eran magníficos, embrujados y llenos de apariciones, magia y espíritus femeninos. Símbolos de la antigua belleza que proviene de un tiempo ancestral, cuando hombres y animales vivían juntos y hablaban el mismo idioma.
El 1970 Vali viaja a New York en donde vive hasta el año 1992. Es la primera vez que decide comenzar a vender su trabajo.Pronto hace amistades y encuentra un lugar ideal para vivir, el Hotel Chelsea. Como Vali tardaba desde 6 meses a dos años en terminar sus ilustraciones, Andy Warhol le sugiere comenzar a vender reproducciones. De ese modo comenzó a vivir su obra, siendo Salvador Dalí -quien era un profundo admirador de sus dibujos y particular caligrafía- el curador de su primera muestra formal realizada en Holanda el año 1972.Una de sus grandes amigas fue Patty Smith, quien lleva en su rodilla un dibujo de un rayo tatuado por “la bruja de Positano”.
Al terminar esta etapa, vuelve a su querido valle, alternando si vida entre la naturaleza y la ciudad de Melbourne, en donde exhibía sus trabajos regularmente. El año 2003 Vali lamentablemente muere de cáncer: “He tenido 72 años absolutamente encendidos. La enfermedad no me molesta en absoluto, porque, ya sabes amor, cuando has vivido como yo, has hecho absolutamente todo. Estoy poniendo todos mi fuerza en vivir; los remedios pueden matarte. Estoy en el hospital, y creo que moriré aquí. Cada escarabajo, cada pájaro…todo el mundo vienen al mundo y luego se va”
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